Vas a tomar un velón azul ofrecido a San Miguel Arcángel. Escribe en el velón tu nombre 3 veces de abajo hacia arriba (desde la base del velón hacia la mecha) mientras piensas que todos los obstáculos, temores, malestares, angustias van a ser disueltos en ti en la medida que se consume ese velón.
Vas a untarlo luego con aceite de oliva, aceite de la victoria.
Encendiendo un día Martes a las 7 de la mañana
Dirás la siguiente oración:
San Miguel Arcángel, tu que eres la valentía pura del padre creador representada en ti, tu que tienes el poder de dominar los demonios y expulsarlos de donde quiera que estén, asiste a mi plegaria en este momento y DISUELVE TODO TEMOR, TODA ANGUSTIA que este afectando mis emociones, mis pensamientos y mi vida en este momento. Elimina los obstáculos internos que me han mantenido detenido hasta hoy.
Disuelve San Miguel Arcángel con tu espada todo malestar emocional que me esta afectando.
Dame con esta luz la claridad y permíteme vencer asi como tu venciste y vences aún por toda la eternidad.
Paz Cristo
Cristo Paz
Paz Cristo
Cristo Paz
Paz Cristo
Cristo Paz
Amén.
Este ritual deberá repetirse constantemente hasta que desaparezcan todas las dolencias del alma que estén afectando pues tiene el poder de ir disolviendo progresivamente los temores, los obstáculos inconscientes conscientes. Poco a poco te irás sintiendo diferente, sin tantos pesos, las personas te dirán que estas mejor o que te ven mejor…